jueves, 20 de marzo de 2014

Las lenguas de ayer siguen vivas en las chicas de hoy

     Cualquier estudiante de una lengua moderna está familiarizado con los certificados europeos que acreditan un nivel determinado de conocimiento de esa lengua, desde el A1 de los principiantes hasta el C2 de los más avanzados. Pues bien, desde el año 2010 también los estudiantes de lenguas consideradas muertas, es decir, los privilegiados estudiantes de Latín y Griego, pueden obtener un Certificado Europeo de conocimiento de estas lenguas. Este certificado recibe el nombre de ELEX (European Latin Exam) para la lengua latina y EGEX (European Greek Exam) para el griego, y está articulado en 4 niveles: Vestibulum, Ianua, Palatium y Thesaurus.
        Tres alumnas de 2º de Bachillerato de nuestro instituto decidieron este año, allá por diciembre, probar suerte con el primer nivel de ambas lenguas. La prueba se articula en torno a un texto sobre el que se plantean varias cuestiones de comprensión y conocimiento gramatical. Este año el texto de la prueba de Latín trataba sobre la famosa hazaña de Teseo, el héroe ateniense que mató al Minotauro en el laberinto de Creta. Y el texto en griego nos hablaba sobre la infancia de Aquiles y la posible etimología de su nombre. A las cuestiones relativas a los textos se añaden otras sobre la cultura, historia y literatura de Roma y Grecia respectivamente.
         Para un alumno que ya ha cursado un primer año de Latín y Griego esta prueba se convierte en un estímulo, en la manera de demostrarse a sí mismo que ha adquirido los fundamentos de estas lenguas. Nuestras tres compañeras, Eva, Johanna y Alba, decidieron probarse a sí mismas y obtuvieron un estupendo resultado: "medalla de plata" en las dos lenguas. Hace unos días recibieron los Certificados Europeos de este primer nivel y así hemos querido que quedara reflejado. ¡Enhorabuena a las tres!