Mostrando entradas con la etiqueta poesía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta poesía. Mostrar todas las entradas

miércoles, 2 de diciembre de 2009

El enigma del mayor poeta griego (Tania Moreno)

Este artículo que he leído trata sobre los enigmas sobre la persona de Homero que han llevado a una de las discusiones mas apasionantes de la historia literaria llamada ‘’cuestión homérica’’. Esta escrito por Oscar Martínez.

Me he decidido por la exposición de este artículo, puesto que me parece muy interesante ya que hemos trabajado sobre ello en clase traduciendo textos de la guerra de Troya que como todos sabemos se incluyen dentro de la Iliada y la Odisea.


Homero, gracias a la imagen que la tradición nos ha dejado de él, se sabe que fue un venerable ciego que recorría las ciudades de Grecia recitando ante un gran público, hazañas que dejaron su vida ante los muros de Troya. Nada se sabe de la fecha del nacimiento ni de su muerte y tampoco el nombre de la ciudad que vio nacer a dicho personaje. A él se le atribuyen la Iliada y la Odisea que son dos poemas monumentales que narran los episodios de la Guerra de Troya.
En unas fechas relativamente cercanas ponían en duda si el autor de la Iliada y la Odisea era Homero. A esto es a lo que llamamos cuestión homérica.



• Los gramáticos de la famosa Biblioteca de Alejandría (S III a.C) distribuyeron la Iliada y la Odisea en 24 cantos cada una, y determinaron que el resto no le pertenecía.








• En Italia hubo un filósofo que llegó a negar la existencia de Homero, argumentando que Homero era solo una idea del pueblo griego.




Federico Augusto Wolf (1795) fue un filósofo alemán que argumentaba que la Iliada y la Odisea tenían su origen en poemas más breves compuestos por diferentes autores a lo largo del tiempo.
















Aunque el enigma sigue vigente, se acepta la existencia en el siglo VIII a.C de un poeta ciego llamado Homero que compuso un gran poema sobre Troya y en su vejez, narró el viaje de regreso del héroe que ocasiono su caída.

Esta actividad me ha parecido curiosa y amena, porque es una divertida forma de culturizarse y de enseñar a nuestros compañeros de una forma un poco esquematizada lo bueno que hemos aprendido del artículo.
Siguiendo la recomendacion de Azucena, me gustaria decir que un libro citado por ella anteriormente, llamado '' La hija de Homero'' tiene relacion con el tema de este articulo.

Aquí os dejo un video de la historia del caballo de Troya cantada por un grupo llamado Mago de Oz.



.

jueves, 29 de octubre de 2009

El EPITAFIO de SEIKILOS (gracias a Ianire)



Sí, gracias por hacerme un poco menos ignorante al descubrirme este fragmento del pasado. Hablando de ταφος llegamos a la palabra "epitafio", que tú rápidamente asociaste con algo oído en la clase de música: el epitafio de Seikilos. Y así me lo has descubierto a mí: sobre esta columna de piedra, encontrada cerca de Éfeso(recordad la palabra "adefesio") está grabado el epitafio que Seikilos dedicó a su esposa Euterpe; unas bellísimas palabras, invitación a disfrutar el presente, que arriba podéis leer en griego y cuya traducción sería:


"Mientras vivas, brilla, no estés triste en absoluto porque la vida es breve y el tiempo exige su tributo"


Son palabras hermosas por sí mismas, pero han pasado a la historia porque sobre ellas está anotada la que se conoce como la melodía escrita más antigua. Aquí os dejo un vídeo para que podáis escuchar una recreación de lo que pudo ser esta melancólica melodía.Gracias,Ianire.

martes, 6 de octubre de 2009

CATULLI VOX ( la voz de Catulo)

Os invito a conocer otro poema de Catulo, el que tanto amaba y tanto odiaba a Lesbia, pero esta vez vamos a OIR al "Miser Catullus" en la voz de un joven inglés: en la segunda lectura podéis seguir el texto en latín , como si fueran subtítulos. A ver qué os parece.

>



La traducción de estos versos del poeta desengañado sería la siguiente:


Desdichado Catulo, deja de hacer el tonto,
y lo que ves perdido, déjalo así.
Brillaron en otro tiempo para ti resplandecientes soles,
cuando ibas una y otra vez donde una chica te llevaba
amada por nosotros como ninguna lo será.
Entonces aquellas situaciones tan divertidas te parecían,
las que tú deseabas y la chica no rehusaba,

brillaron, sin duda, resplandecientes para ti los soles.
Ahora ella ya no quiere: tú, conteniéndote, tampoco quieras,
ni persigas a la que huye, ni seas desdichado,
sino que obstinadamente aguanta, resiste.
Adiós, chica. Catulo ya resiste,
no te perseguiré ni te rogaré al encontrarte.
Pero tú sufrirás, cuando nadie te ruegue.
Maldita, ¡ay de ti! ¿Qué vida te espera?
¿Quién estará ahora junto a ti? ¿Quién te verá bella?
¿A quién amarás ahora? ¿De quién dirán que eres?
¿A quién besarás? ¿A quién le morderás los labios?
Mas tú, Catulo, firme resiste.”


(CATULO, VIII. Trad. de Antonio L. Cantudo)